Desde tiempos muy antiguos nuestros antepasados toman en cuenta distintos instrumentos como majestuosos, y el tambor chamánico no es una excepción, ya que a través de su sonido y ritmo, encontramos una gran cantidad de beneficios y posibilidades.
Con la utilización de este tipo de tambor, logramos generar trances, que se ven influenciados por los diferentes estados rítmicos que nos ofrece su percusión, llegando a ser una de las herramientas más utilizadas por los maestros para sanar.
Se ha comprobado que, entre las habilidades que posee este increíble instrumento, su sonido puede ir en completa concordancia con las diferentes ondas electromagnéticas y alfa que se producen en el cerebro.
Además, estas ondas, y este sonido, poseen una sorprendente similitud con los latidos que han comprobado que genera la tierra misma.
Existen dos propósitos básicos por los cuales los chamanes utilizan este tambor, y esos son mover la energía, o cambiar el estado de conciencia.
Cuando un chamán desea viajar, es necesario que se realice un cambio a un estado de conciencia distinto, para así lograr viajar, y esto se logra con la ayuda del tambor. Así mismo, es utilizado para poder ver a los clientes a través de ojos espirituales.
Al querer llamar a los espíritus se necesita enviar y recibir diferentes energías, y lo logran a través del cambio de ondas, que se generan por las distintas técnicas utilizadas para producir el sonido del tambor.
¿Cómo podemos sanar utilizando el tambor chamánico?
Muchas personas hoy en día se encuentran atravesando momentos difíciles, han perdido la motivación, son infelices y no entienden por qué se sienten de esta forma, sin percatarse de que todas las respuestas se encuentran en el inconsciente, y que de hecho, sí podemos acceder a ellas.
Algunos de los chamanes que utilizan esta herramienta incluso le llaman “caballo volador”, logrando que con un ritmo de 200 a 220 golpes se sanen diferentes dolencias emocionales que desde hace tiempo se encontraban dentro de las personas.
En su mayoría se realiza la ceremonia bajo un árbol, ya que de esa forma las ondas del instrumento se van unificando con el compás natural, logrando generar así un movimiento interno en aquellos que estén vivenciando la ceremonia.
¿Cómo es su sonido? ¿Suena como cualquier tambor?
El tambor chamánico, a diferencia de los tambores regulares, tiene un sonido más bajo, incluso comparándolo con el mismo instrumento el bajo.
También poseen un sonido bastante resonante, que difiere de los tambores comunes, a los cuales solo se les da un toque rápido, generalmente en los tambores chamánicos existe un sonido de eco, que persiste durante su utilización.
Sin embargo, lo que es recomendado por los maestros es probarlos y confiar en los resultados, ya que podrían funcionar algunos mejores que otros, incluso con un sonido que percibamos idéntico.
La confianza se obtiene a través de la obtención de resultados positivos en las ceremonias que llevemos a cabo con nuestro instrumento.
¿De qué materiales están hechos estas maravillosas herramientas?
Existe un procedimiento espiritual enfocado en esta técnica, desde tiempos ancestrales, y es que el chamán que utilizará el tambor, deberá tomar del árbol de la vida aquella madera con la que luego procederá a realizar su instrumento.
La mejor forma de crearlo es de forma alargado, ya que gracias a eso su sonido será mucho más continuo y prolongado, lo cual servirá de gran ayuda durante las ceremonias. Por supuesto, también dependerá del tipo de maestro la cantidad de adornos que poseerá.
Es tradición decorarlo con piel de animales, y lo más común es que el animal a escoger sea aquel que predomine en la vida espiritual del chamán que será guía ceremonial.
No soy un chamán, ¿podría tocar yo un tambor?
Es común que dudemos si seremos capaces de obtener los mismos beneficios, si somos nosotros quienes están a cargo de la percusión, sin embargo, es posible obtener resultados positivos sin la asistencia de un chamán.
La recomendación es que asistamos a una ceremonia chamanista, y luego de sentirnos en consonancia con el ritmo y la experiencia, conectando con el sonido del tambor, podremos comprender cuál es el sentir que buscaremos posteriormente por nuestra cuenta.
El tambor chamánico Dakota es uno de los más recomendados para sonidos revitalizantes, y podemos tocarlo nosotros mismos para provocarnos la relajación que tanto anhelamos, incluso pidiendo que sea forrado con la piel de nuestro animal de preferencia.